miércoles, 11 de abril de 2012


PODEMOS CAMBIAR ESTA SOCIEDAD EN QUE VIVIMOS

El domingo 25 de marzo debía hacer un viaje a una ciudad cercana de donde vivo.Al subir al autobús en el terminal,éste aún se encontraba vacío y me di el lujo de escoger el puesto donde me iba a sentar,por alguna razón siempre me inclino a buscar los del lado derecho del bus.Quedé ubicado en el segundo ,el primero no me gusta porque es inseguro.

Esta clase de buses la mayoría solo tiene una barra horizontal frente al pasajero la cual está muy alejada,lo que conlleva a que si colocas tu mano sobre la barra anatomicamente quedarás mal sentado y si no te sostienes quedarás corriendo del riesgo de accidentarte si en algún momento el conductor deberá aplicar los frenos de manera inesperada.

Pasaron pocos minutos antes que los próximos pasajeros llegaran,eran tres personas: Una mujer a quien le calculo unos 50 años,un hombre de unos 60 y un niño de 7 quien fue el primero que subió ubicándose inmediatamente en el puesto peligroso.

Señora: Ahí no,pásate para acá!
Niño:     Noo yo quiero aquíi!..
Señora en un tono mas alto: No señor,siéntese acá!.
El niño insiste: Noo,aquii!
Interviene el hombre en un tono que yo le llamaría gritado:YA LE DIJERON QUE NO,PÓNGASE ACÁ….CÓRRASE PA'LLÁ CARAJO!!
Yo entendí que el caballero quería proteger al niño,mas al voltearlo a mirar tuve la intención  de pedirle que le explicara la razón por la cual no debería sentarse allí,pero me contuve al sentir que en vez de hacerlo reflexionar me ganaría un insulto.
Después de escuchar dos gritos mas el niño se ubicó donde le ordenaron sus abuelos (supongo yo que eso eran para él).

No se si esta criatura alguna vez en su vida entenderá la razón por la que sencillamente hacer su propuesta se llevara a cambio un par de gritos.Lo que si estoy seguro es que cuando crezca habrá aprendido a gritar también y lo hará con sus hijos,esposa y tal vez con sus subalternos si llega a ser "jefe".

Algo no muy diferente ocurre en las escuelas.Los chicos van por primera vez al jardín o a la escuela  muchos de ellos sin saber porqué. Entonces se estresan,se asustan,lloran y forman algunos berrinches hasta que se adaptan.Al cabo de algunos años continúan en el "conocimiento" de tantas cosas que los obligan a aprender,pero jamás se les explica a ciencia cierta el porqué están ahí y de qué les servirá todo eso en el transcurso de su vida.Algunas veces acaban odiando a su maestro o maestra y viceversa.

Estos adultos del mañana terminarán viviendo en piloto automático y para mas tristeza algunos ocupando puestos públicos y hasta gobernando un país.

Expliquémosle a nuestros niños el porqué de las cosas,así crecerán tomando conciencia de cada acción y decisión a tomar.Sembremos en ellos la semilla de la grandeza cultivando valores para que los defectos no se noten.

Quieres ayudarme a cambiar esta sociedad?.Eduquemos bien a nuestros hijos!..yo ya lo estoy haciendo y me siento orgulloso de la respuesta que me da mi hijo Daniel de 9 años.

Que el amor llene tu ser.

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